Pro Miguel Ángel Álvarez Álvarez.- Esta mañana he salido de una guardia de mi SUMMA 112 relativamente tranquila. Los pacientes que nos han visitado tenían una evidente necesidad de asistencia: dolor de muelas, cólico renal, reacción alérgica, vómitos continuos , etc, todo ajeno al coronavirus. Ninguno tenía fiebre, tos seca continua o dificultad respiratoria con sensación de falta de aire que son los tres síntomas esenciales. El que sufra esta sintomatología debe quedarse en casa y llamar a los teléfonos que nos han indicado. Si tardan en contestar, hay que insistir porque se han incrementado las líneas y no tenemos otra cosa que hacer; mientras tanto nos tomamos paracetamol, primero de 500 mgr y si a las dos horas seguimos igual nos tomamos otros 500 mgr. Hay que tomar la mínima dosis eficaz. Queda prohibido, por lo que he leído y me cuentan mis autoridades sanitarias, el ibuprofeno u otros antiinflamatorios. El paracetamol alivia los síntomas mientras dura el proceso. Hay que hidratarse muy bien con dos litros de agua al día.
Debemos quedarnos en casa porque de esta manera se bloquea el contagio. El virus acabará desapareciendo si no tiene nuevos huéspedes. Salimos a la calle, y aunque no haya un contagio directo por vía respiratoria, si puede haberlo al tocar el banco de sentarnos, el cristal, la puerta, etc. En estos sitios puede permanecer activo un tiempo de 12, 24 o más horas. Vengo de comprar el pan y observo que no se ve a nadie por la calle en plan de paseo o de ocio y el orden en la fila del pan estaba muy bien establecido por lo menos en esta panadería.
Debemos comportarnos todos como héroes y lo estamos haciendo. Ayer me llegaba el mensaje del homenaje y le replicaba al que me lo mandó que no se olviden del personal de limpieza, los administrativos, los de mantenimiento de todos los centros sanitarios; hay que añadir a todo el personal que se encarga de atender los centros de abastecimiento y cuidado de todos los ciudadanos. No olvidemos a los conserjes de nuestras viviendas. No es fácil quedarse en casa con niños y mayores que están acostumbrados a salir todos los días a la calle y que les va a costar mucho comprender esa restricción. Por eso recalco que todos nos vamos a comportar como héroes. Yo hago las frases como se me van ocurriendo y espero que todo el mundo me entienda.