El Ayuntamiento de Madrid está realizando en verano su operación asfaltado en las calles de Madrid, aprovechando las buenas temperaturas y que el tráfico desciende en esta época del año. El objetivo es mejorar la comodidad y seguridad de los usuarios de las vías en las que se interviene, disminuir los niveles sonoros de rodadura y la contaminación del aire, y preservar el patrimonio municipal viario, evitando deterioros que en caso de no intervención obligarían a una renovación completa del pavimento y por lo tanto una inversión mucho mayor.
Entre los criterios para priorizar las calzadas a rehabilitar ha estado el nivel de obsolescencia de las mismas y la intensidad media de tráfico que soportan. Dado que la vida media útil del pavimento de calzadas es de unos 15 años, más allá de las labores puntuales de conservación, se debe renovar totalmente sus capas de rodadura, una vez cumplido ese periodo, si se quiere mantener un estado óptimo de conservación.
En total son unas 320 calles y la operación también incluye la renovación del pavimento de 12 túneles de la ciudad y del paso inferior de Alfonso XII, en los que se intervendrá en un total de 90.000 m2.
En Villa de Vallecas la operación asfaltado comenzó en la calle Sierra Vieja y ha continuado por las calles Puerto de Pozazal (corte anterior asfaltado – final calle), Sierra Gorda (aparcamientos), Navamures, Lumbrales, Sierra del Torcal, Peña de Vargas, Monte Santo, Pico de la Brújula, Camino del Espinillo, Sierra Gador – Sierra Guadalupe, Peña Nueva, Peña Cervera, Sierra Espuña, Sierra Aitana, Alto de Lillo, Montes Alberes, Fuentidueña y Palazuelos.