El Servicio de Cardiología del Hospital Universitario Infanta Leonor, situado en el distrito madrileño de Villa de Vallecas, ha realizado el primer implante en la Comunidad de Madrid y el segundo en toda España de una nueva generación de marcapasos sin cables, indicado para el tratamiento de pacientes con bloqueo aurículoventricular.
La intervención del dispositivo, que es diez veces más pequeño que un marcapasos tradicional, se llevó a cabo el 1 de junio por un equipo de especialistas del Servicio de Cardiología apoyado por anestesiólogos. El paciente, un varón de 83 años afectado de un bloqueo aurículoventricular de segundo grado, no presentó ninguna complicación, ni durante el implante ni en el postoperatorio, siendo dado de alta a las 24 horas de la intervención, tras comprobarse el funcionamiento óptimo del marcapasos.
El marcapasos sin cables se introduce a través de la vena femoral mediante un catéter, en una intervención mínimamente invasiva. Realiza las funciones de un marcapasos, pero evita las complicaciones derivadas de la presencia de cables dentro de las cavidades cardíacas y de una batería alojada bajo la piel mediante un procedimiento quirúrgico.
Asimismo, permite una movilización temprana de los enfermos, con las consiguientes ventajas de prevención del deterioro funcional. Por tanto, los pacientes con mayor riesgo de sufrir los problemas asociados a los marcapasos con cables (pacientes de avanzada edad o afectados por enfermedad renal crónica, diabetes, enfermedad pulmonar, en tratamiento corticoideo…) son los principales candidatos a beneficiarse de este avance tecnológico.
La novedad del dispositivo implantado en el Hospital Universitario Infanta Leonor es que incorpora algoritmos capaces de detectar la actividad auricular y permite que los impulsos ventriculares estén sincronizados con la aurícula. El resultado final es una estimulación cardíaca más natural y una mejora en la eficacia de la función del corazón.
Cuando se produce un bloqueo aurículoventricular, las señales eléctricas entre las cámaras del corazón (las aurículas y los ventrículos) dejan de estar coordinadas. La terapia habitual para tratar este trastorno es la implantación de un marcapasos, que ayuda a restaurar el ritmo normal del corazón y alivia los síntomas, al sincronizar la actividad eléctrica de las aurículas y los ventrículos.
Al lograrse este proceso, denominado sincronía auriculoventricular, los pacientes logran un mayor flujo sanguíneo desde el corazón al resto del organismo y, en definitiva, una mejora sustancial en su calidad de vida.
Salto enorme en la estimulación cardiaca
Históricamente, los pacientes afectados por este trastorno han sido tratados con marcapasos tradicionales de doble cámara que se implantan en la parte superior del tórax, debajo de la piel de la clavícula, y se conectan al corazón mediante unos cables.
Por ello, esta nueva generación de marcapasos sin cables supone un salto enorme en el trata-miento del bloqueo aurículoventricular, ya que permite expandir una tecnología que hasta ahora se restringía aproximadamente a un 30% de los pacientes con este tipo de indicación para la estimulación cardiaca. Con el nuevo sistema, hasta un 90% de los pacientes podrían ser candi-datos a este tipo de marcapasos sin cables.
La incorporación de esta terapia en el Hospital Universitario Infanta Leonor está en línea con la apuesta del Servicio de Cardiología por incorporar los tratamientos de última generación que supongan un avance en la mejora de la salud, en la seguridad y calidad de vida de los pacientes y en la gestión de los procesos clínicos.